Entre los libros de negocios, o para finanzas personales, más conocidos está: Padre Rico, Padre Pobre. Un libro escrito por Robert Kiyosaki que ha tenido un increíble alcance a nivel mundial y nos enseña una forma diferente de ver el dinero.
Si bien es un interesante libro donde se encuentran experiencias personales para alcanzar el éxito, no es una guía de cómo volvernos ricos de la noche a la mañana. Más bien, se trata de una especie de escrito reflexivo que tiene el fin de ampliar la perspectiva que tenemos sobre el dinero y cómo producirlo.
En esta reseña hablaremos sobre este interesante libro que ha roto las expectativas de muchos en cuanto a las finanzas personales y el triunfo económico.
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Muchos de los que recomiendan este libro, lamentablemente caen en el error de presentarlo como una obra que te permitirá alcanzar la libertad financiera. Pero, no hay que engañarnos. Este libro no contiene una varita mágica, o una especie de “paso por paso”, que nos convertirá en ricos con solo leerlo.
Esta obra literaria, está basada en las experiencias que el autor vivió al seguir los consejos de sus dos padres. Más que una guía para hacernos ricos es una filosofía que nos invita a reflexionar en cómo gestionamos nuestras finanzas personales. Además, nos incentiva a cuestionarnos sobre los mecanismos que necesitamos para “producir” el dinero que necesitamos.
Por otro lado, siempre se nos ha enseñado que para ganar más dinero es necesario que trabajemos mucho más duro. Padre Rico, Padre Pobre nos indica que esta enseñanza no siempre es cierta, que es posible ganar más y hacer menos. ¡Una locura!
Romper estigmas es uno de los objetivos de este libro puesto que, el Padre Rico nos motivará con sus enseñanzas a explorar e ir más allá de lo tradicionalmente aprendido.
Y si bien se enfoca en la forma en la que vemos el dinero, puede servirnos para reflexionar sobre todo lo que nos rodea.
¿Quiénes son los dos padres? El padre pobre se trata del padre bilógico de Robert. Un hombre honrado que defiende la creencia de un sistema en el que es imprescindible estudiar formalmente y trabajar duramente para alcanzar el éxito. Si bien es un pensamiento bastante común, y que no tiene nada de malo, Robert Kiyosaki lo define como un pensamiento que se encuentra fuera de la época.
Un pensamiento que no tiene futuro por el continuo cambio y la evolución constante del sistema así como de la tecnología. El padre pobre tiene la creencia de que mientras más trabajes, más lejos llegarás. Pero, Robert cuestiona esta creencia y se centra en las posibles consecuencias de trabajar para otros, tales como el desgastamiento y el abandonar los sueños personales por trabajar en los sueños de otros.
Por otro lado, el Padre Rico se trata del padre de un amigo de Kiyosaki. Un hombre exitoso que creía en las inversiones inteligentes y el arte de utilizar el dinero para producir más dinero. Este le aconsejaba poner el dinero a trabajar por él, en vez de ser él el que trabajara sin parar.
El Padre Rico es un hombre sin estudios formales que se ha enfocado en establecer claramente sus ideas sobre el dinero y cómo este trabaja por ti. Tuvo que dejar sus estudios debido a la muerte repentina de su padre y encargarse del negocio que su padre había iniciado.
De esta forma, aprendió de forma práctica cómo el esquema tradicional del estudio y trabajo arduo no siempre funciona para alcanzar el éxito.
Padre Rico, Padre Pobre nos proporciona dos increíbles perspectivas por medio de las experiencias que Robert pudo vivir durante su infancia. Ya que, tener acceso a estos dos estilos de vida le permitió ampliar su punto de vista sobre cómo alcanzar el éxito en la vida.
De esta forma, en el libro se plantean las ventajas y desventajas de ambas perspectivas. No obstante, resalta los consejos del Padre Rico y los considera como los mejores para aplicar en un mundo cambiante e inestable.
Debemos recordar que la enseñanza tradicional de estudiar y conseguir un empleo estable, está fundamentada bajo la creencia de un mercado estable que se mantendrá siempre igual. Así como basada en una especie de pensamiento conformista que se enfoca en poder suplir las necesidades y seguir trabajando y trabajando.
Es por esto que, se plantean distintos escenarios en los que esta clásica enseñanza no produce resultados satisfactorios sino que, más bien, es capaz de causar catástrofes. Robert, además, relata las distintas situaciones por las que tuvo que pasar debido a seguir los consejos que su padre pobre le había dado.
Sin embargo, lo que mayor destaca dentro de todo este cúmulo de lecciones es la importancia que tienen los conocimientos financieros. Algo que no se toma en cuenta con suficiente hincapié en el sistema educativo.
Siguiendo este desenlace, el libro tiene el objetivo de incentivar a sus lectores a tomar las riendas de su vida financiera. Motivándolos a prepararse lo suficiente en los aspectos económicos que verdaderamente importan.
La mayoría, por no decir todos, le tiene miedo a lo desconocido. En el caso del dinero, resulta igual. El gran desconocimiento que existe alrededor de las finanzas personales, ha tenido como resultado que muchos desarrollen un miedo al dinero.
El miedo a no saber cómo utilizarlo de la manera más eficiente, el miedo a invertir, el miedo a ahorrar en economías con problemas de inflación. Padre Rico, Padre Pobre tiene la capacidad de motivar al lector a perderle el miedo al dinero. Pero, ¿Cómo podemos perderlo?
Robert Kiyosaki lo entendió cuando tuvo que atravesar situaciones complicadas al seguir el modelo de vida de su padre biológico. Entendió que lo que debía hacer era preocuparse, y ocuparse, de entender a fondo las finanzas y todo aquello que tiene relación con el dinero.
Al hacerse un experto en esta área, estuvo preparado para tomar riesgos y aprender de las experiencias vividas. Siguiendo el ejemplo de su padre adoptivo, quien aprendió que no era necesario hacer todo lo que le decían para tener éxito y que se convirtió en uno de los hombres más ricos de Hawaii.
Sin duda alguna, Padre Rico, Padre Pobre es un libro que tiene mucho que ofrecer. Siempre y cuando entendamos que no es una guía mágica. Es una filosofía basada en las dos perspectivas que recibió el autor gracias a sus dos padres.
Es una filosofía que nos motiva a perderle el miedo al dinero, tomar riesgos y romper los esquemas tradicionales. Eso sí, preparándonos por medio del conocimiento sobre la mejor gestión de nuestras finanzas personales.
